DENOMINACIÓN DE ORIGEN
Andante
Existe un disolvente altamente corrosivo llamado “Olvido”, que lentamente va haciendo desaparecer el pasado más reciente, y no digamos con respecto al pasado histórico. Y es que cuesta recordar en medio del caos informativo que nos invade a diario, como una amenazadora selva lorquiana.
Allegro vivace
No hace muchos días que he presentado mi último libro: “Lorca, la incógnita visita”(Work in progress), en su segunda edición, y otra vez comienzan a ser muchos los que se extrañan, o se sorprenden de que un pintor de Tarragona, escriba, y no tan solo escriba, publique. He dicho más de una vez que si hago mis actividades en Tarragona, no es porque sea “Un pintor de Tarragona”, es decir, nacido en Tarragona; si no porque estoy aquí, de la misma manera que lo he hecho cuando he vivido en otras ciudades. Vivo aquí, y me parece del todo natural que buena parte de mis actividades se produzcan aquí. Aun así, no tengo un espíritu especialmente territorial, nunca lo he tenido y por lo tanto, tanto soy un pintor de Tarragona, como de Barcelona, de Madrid o de Ultramar.
Allegro ma non tropo
Han sido muchos los artistas plásticos que han escrito a lo largo de la historia, con más o menos fortuna. El primero, de los que yo conozco, porque puede que hubiera alguno de los filósofos de la Grecia clásica, fue San Lucas, El buey alado, que no tan solo escribió el Evangelio que lleva su nombre, y “Los Hechos de los Apóstoles”, si no que además se le atribuye el primer retrato de la Virgen María que se conserva en el Vaticano, y una pintura, también de María, en los muros de las catacumbas de Priscila en Roma. También se dice que hizo el único retrato de Jesús dibujado en presencia del Hijo de Dios. Era médico y dentista, es por esta razón que es el patrón de los médicos y de los artistas. No puedo dejar de mencionar a San Juan de la Cruz, extraordinario poeta que se vio obligado a comerse sus escritos, por miedo a que no se los descubrieran las furias de la Santa Inquisición. En estado de tránsito al éxtasis realizó un dibujo en escorzo del Cristo crucificado. Un dibujo emocionado y emocionante, que inspiró a Salvador Dalí (que también escribía) para pintar su Cristo de Port Lligat, y a Josep Maria Subirachs para el Cristo del altar mayor del Templo de la Sagrada Familia de Barcelona. Fueron muchos los pintores y escultores del renacimiento que también escribieron, Leonardo da Vinci, su “Tratado de la pintura”, Miguel Ángel y los poemas dedicados a Tomaso Cavalleri. Y los ya más contemporáneos, Santiago Rusiñol y sus artículos, su teatro, García Lorca, los poemas, el teatro, y sus deliciosos dibujos. Picasso, “El deseo atrapado por la cola”, Miró y sus poemas dadaístas, Jean Cocteau, cine, teatro, poesía. Narcís Comadira, Perejaume, Frederic Amat, y así la lista se va haciendo larga, muy larga.
Andante
Muchos de los artistas del renacimiento eran conocidos por el nombre correspondiente al pueblo o al territorio de donde eran originarios, tanto es así que, asociado a su nombre, en muchos casos ha derivado en apellido. Tal es el caso de Leonardo da Vinci, o de Doménikos Theotokópoulos “El Greco”, originarios, el uno de Italia de un pequeño pueblo llamado Vinci, la otra de Grecia. Una costumbre que se ha ido perdiendo con el tiempo, de la misma manera que se ha ido perdiendo el uso de los apodos con los cuales se solían designar los componentes de una misma familia. Mi familia por parte de madre, eran conocidos como “Los Felinxos”, o de Cal Felinxo, y por lo tanto quizás yo habría sido conocido por “El Rosselló de Tarragona”, o “El Rosselló de cal Felinxo”. Vete a saber… porque como de pintores somos un buen rebaño, la denominación “Pintor de Tarragona”, no habría contribuido más que a crear confusión, de la misma manera que en el intento de distinguir, no haría otra cosa más que diluir y localizar territorialmente a un personaje.
Allegro con fuoco
Ahora hace unos cuantos años, más de treinta, porque estábamos en los años 80, hice música, porque me empujó una imperiosa necesidad. Tenía una deuda conmigo mismo y con un poeta: Federico García Lorca, y musicalicé algunos de sus poemas, que ofrecí en recitales por toda Cataluña, acompañado al piano por el inestimable Charles Miles.
Cuando después, en Madrid estando, (¿pintor de Madrid?), rompí la guitarra de lapislázuli, delante del crítico de arte Santiago Amón, que decía a todo el mundo que yo había quemado un piano de cola, en la playa de San Sebastián de Sitges (¿pintor de Sitges?), me dijo que yo había conjurado mi pintura, y que tarde o temprano se irían haciendo evidentes en mi obra, la presencia de la poesía y la música. La creación, en cualquiera de sus vertientes es un juego, un juego de alto riesgo, un juego en el que nunca se pierde ni se gana. Se juega. Y tanto da si un pintor con denominación de origen: Tarragona, escribe, hace música o decide hacer malabares en el circo. Es un artista que avanza en el incierto Camino del Ángel.
Josep Maria Rosselló / 20-9 – 2015